Dirección: Félix Fernández de Castro.
País: España.
Año: 2010.
Duración: 80 min.
Género: Documental.
Intervenciones: Miguel Gallardo, María Gallardo, May
Suárez.
Guión: Félix Fernández de Castro e Ibon Olaskoaga;
basado en el cómic de Miguel Gallardo.
Producción: Loris Omedes.
Música: Pascal Comelade, Vetusta Morla, Kevin
Johansen y Antonia Font.
Fotografía: Sergi Volanova.
Montaje: Ibon Olaskoaga.
Distribuidora: Bausan Films.
Estreno en España: 16 Julio 2010.
Apta
para todos los públicos.
El universo de María y su padre
Miguel Gallardo se muestra en este íntimo y sincero documental basado en el
libro que lleva su mismo nombre. Se trata de un testimonio de la especial
relación que les une, una relación que atrae al espectador absorbiéndole hasta
el final. La manera como es mostrada la relación de Gallardo y su hija María se
aleja de todo dramatismo para convertir el documental en un soplo de aire
fresco y optimismo frente a las dificultades de la vida. A priori el tema
podría parecer algo dramático, ya que el autismo de María le impide a sus 14
años de edad llevar una vida normal. Aun así lo sorprendente de “María y yo” es
que está repleto de escenas entrañables y de buen rollo.
Este positivismo e ironía marcan la personalidad del documental, de igual modo
que inundan las páginas del cómic en el que éste se basa. Da la sensación de
que Gallardo le ha contagiado al filme su propio carácter y que en cada uno de
sus ochenta minutos se despoja de una prenda, desnudándose sin tapujos ante el
espectador. María es, a pesar de su enfermedad, el vivo reflejo de su padre y
de May (su madre), y me gusta creer que tal y como lo hace Gallardo, ella
también usa la ironía en ciertos momentos. De hecho se intuye este rasgo en su
carácter, sobretodo en las conversaciones que mantiene con su progenitor.
Las reflexiones de Gallardo
convierten el documental en una auténtica lección de humanidad y de humildad.
Encontramos a un padre que no lo ha tenido nada fácil ya que tras la ruptura
con su pareja se encontró con el alejamiento de su única hija. María vive en
Canarias rodeada de su familia materna, en un ambiente que le permite estar
constantemente atendida, algo que relaja a su madre. María es feliz. Esta es la
sensación que transmite al espectador. Y lo mejor de todo es imaginar la
felicidad que sintió al ver una película de la cual era ella la protagonista
indiscutible. Y es que, ¿Acaso no es ese uno de los sueños de cualquier niño?
Los viajes, el hotel, el
colegio, las rutinas: La vida. María y yo retrata la vida y el universo que
rodea a una persona con autismo, un autismo que comparte y convive con su
familia. Porque al final el autismo es algo que se comparte y en este
documental María y Gallardo lo han compartido con todo aquel que así lo desee.